¿POR QUÉ EL OCIO ES SALUD?

       En Kukúa consideramos el ocio como una forma de salud, y especialmente importante para personas con enfermedad mental. ¿Por qué?
 
- Primero porque en este tiempo de prisas, ambición y metas, dedicarse tiempo a uno mismo suele quedar relegado a un último plano. Casi nos hace sentir culpables, abrir un espacio en nuestras agendas con el fin sencillo de "descansar" o "pasarlo bien porque sí", y cuando conseguimos hacerlo; solemos hacerlo con "prisa". O ¿no os resulta familiar la frase de: -"Vale, me tomo un café contigo, pero deprisa porque tengo mil cosas que hacer"?
¿Cuántas veces posponemos planes suculentos y que realmente nos apetecen porque no tenemos tiempo, o tenemos trabajo pendiente, o "mucho lío", etc? Es importante cumplir con las obligaciones, pero también es muy importante, no subestimar el valor del descanso y el disfrute, porque es la pila mediante la que cargamos nuestra energía.
 
¿Por qué el tiempo de ocio es especialmente importante en salud mental?
 
         Vale, ya sabemos y asumimos que nuestra mente necesita descansar, aliviarse de tensión, despejarse y dedicar un tiempo a lo que nos gusta, sin más fin ni medio que: pasarlo bien. Pero ¿Por qué es especialmente importante el ocio en enfermedad mental?
 
         Quienes conozcan casos o los padezcan, sabrán que con mucha frecuencia, las habilidades cognitivas se ven mermadas paulatinamente; en ocasiones como efecto secundario de la medicación, que ralentiza el procesamiento de información o la capacidad de respuesta. Otras veces, la propia interferencia de la sintomatología (ya sea positiva o negativa) dificulta la concentración, atención, memoria, etc. De manera que si ya resulta complicado un día normal en la vida de cualquiera, añadirle el peso de estos efectos, resulta agotador y requiere mucho esfuerzo y concentración por parte de quienes lo padecen. ¿Imaginas lo que sería un día entero de resolución de operaciones aritméticas complejas de máxima concentración? Resulta muy cansado.
        Es importante reconocer también, que existe un "miedo" generalizado a que la propia enfermedad mental, (a través de la abulia, apatía, etc) sea quien deje inapetente y sin ganas de actividad a la persona diagnosticada. Es entonces cuando muchas veces sin ser conscientes: los profesionales ofrecen un aluvión de actividades, horarios, compromisos, ofertas... consiguiendo una sobrecarga de actividad para la persona con enfermedad mental.
 
          Es por todo eso, que en KUKÚA defendemos la necesidad de abrir un espacio de ocio diferente, divertido y desenfadado a través de nuestras actividades de ocio para enfermedad mental. Por eso os invitamos no sólo a descubrirlo, sino también a proponernos retos, apetencias o necesidades, porque nuestra actividad no tiene sentido si no se ajusta a vuestra realidad; la de personas con enfermedad mental, sus familias y los profesionales y voluntarios que los atienden.